¿En qué consiste la nueva Ley de Vivienda?

La nueva Ley de Vivienda representa un cambio significativo en la legislación española respecto al Derecho a la Vivienda recogido en la Constitución. Con esta nueva ley, el gobierno español aborda de forma efectiva varios aspectos críticos del actual mercado inmobiliario. Estos cambios en la normativa conciernen, principalmente, a propietarios, a las empresas de este sector y, en particular, a aquellas que gestionan alquileres de vivienda.

Los cambios que introduce la nueva Ley de Vivienda


Los cambios introducidos por la nueva Ley de Vivienda de 2023 son amplios y diversos y están encaminados principalmente a garantizar un acceso a la vivienda más justo para el ciudadano, aunque también se plantean una serie de beneficios para los propietarios de viviendas en alquiler. Las medidas más significativas son los siguientes:

Regulación del alquiler y garantías para inquilinos


En lo que respecta a los ciudadanos, de cara al alquiler se han planteado tres reformas principales: 

Aumento de zonas tensionadas

Esto compete y depende de cada Comunidad Autónoma y tomarán parte en ello los Ayuntamientos. Las condiciones establecidas en la ley son, que el alquiler o la hipoteca supere el 30% de la renta media de el/los inquilinos, o bien que el precio de alquiler o venta haya aumentado un 3% por encima del IPC en los últimos cinco años.

Limitación precio del alquiler

Para 2024 se limita a la subida de los alquileres vigentes a un 3% como máximo. Posteriormente, para 2025, queda planteada la creación de un índice de referencia alternativo al IPC. Esté parámetro será el oficial y en el que deberán basarse las subidas de alquiler en adelante.

Gestión inmobiliaria

Los gastos de gestión inmobiliaria, es decir, la comisión que percibirá cada agencia por los contratos de alquiler formalizados, irán a cargo de los arrendadores. A partir de la entrada en vigor de esta ley, los inquilinos no serán responsables de pagar los servicios prestados por agentes inmobiliarios.

Nuevas consideraciones en torno a propietarios y beneficios


Ciertas medidas hacen alusión directa a los inquilinos y cómo puente variar su consideración ante la ley:

Gestión inmobiliaria

Se establecerá la consideración de gran propietario a aquellas personas que tengan 5 viviendas o más en zonas tensionadas.

Beneficios para pequeños propietarios

Las personas con menos de 5 viviendas en propiedad se consideran, por consiguiente, pequeños propietarios. Para ellos se plantean diversas reducciones en el IRPF. Rebajas del 50% por vivienda alquilada; del 60% si se han acometido obras de rehabilitación; del 70% si la vivienda es alquilada a jóvenes o se destinan a fines sociales; y, por último, del 90% si se ha reducido la renta un 5% respecto anterior contrato de alquiler.

Penalización por viviendas vacías

Otro de los aspectos a tener muy en cuenta por los propietarios. Esto se concretaría a través de un recargo del 150% en el IBI. Se considerará vivienda vacía aquella que lleve dos años sin habitar y esté en propiedad de alguien con más de 4 inmuebles en el mismo término municipal.

En conclusión, la nueva Ley de Vivienda en España para 2023 despliega una serie de mecanismos y garantías principalmente orientados a los arrendadores. También se plantean avances sustanciales en materia de desahucios e incentivación de la creación de vivienda pública.

Esta nueva regulación del mercado inmobiliario puede afectar considerablemente a los propietarios si no realizan una planificación correcta de sus activos. Contar con asesoramiento especializado será fundamental para minimizar el posible impacto que esta nueva ley de vivienda pueda suponer, así como para aprovechar los beneficios existentes.