¿Qué es el Fideicomiso?
El fideicomiso es un contrato de gran importancia en el ámbito legal y financiero en el cual una persona transfiere bienes, dinero o derechos a otra para su administración o inversión en beneficio propio o de un tercero. La figura jurídica del fideicomiso está ligada en cierta manera a las cuestiones relacionadas con las herencias. Este contrato, ayuda a agilizar la gestión de bienes por parte de los herederos en gran medida en comparación con las sucesiones al uso.
Por otro lado, designar un administrador encargado de gestionar los bienes temporalmente, y que en determinado momento, estos bienes pasen a otro heredero, es especialmente apropiado para ciertos escenarios. Cuando, en las herencias, intervienen herederos especialmente jóvenes, los testadores suelen temer que su patrimonio no sea preservado: sospecha de que se vendan sus bienes tal como son heredados o se haga una mala gestión de los mismos. Es en estos supuestos donde la figura del fideicomiso cobra mayor sentido.
A continuación abordaremos algunos aspectos fundamentales del fideicomiso: cómo se conocen a las partes involucradas y qué tipo de fideicomisos existen.
Partes involucradas en un fideicomiso
En un fideicomiso, intervienen diferentes actores, cada uno con un papel específico:
- Fiduciante / Fideicomitente: es la persona que transfiere los bienes, dinero o derechos a un tercero, el fiduciario. En otras palabras, es quien tiene el patrimonio e inicia el proceso para confiar su administración a otra persona.
- Fiduciario: es el encargado de recibir y administrar los activos transferidos en el fideicomiso. Normalmente, no tendrá libertad plena sobre los bienes dados. Su responsabilidad principal es gestionarlos de acuerdo con las instrucciones establecidas en el contrato contraído con el fideicomitente.
- Fideicomisario / Beneficiario: es quien recibe los beneficios del fideicomiso una vez se hayan cumplido los requisitos establecidos. El fideicomisario sí tendrá pleno derecho sobre el patrimonio recibido. Puede tratarse de una persona, un grupo de personas o una entidad determinada.
Tipos de fideicomiso
El fideicomiso se concreta a través de un contrato en el cual se establecen condiciones y los términos concretos. En él se detallan las instrucciones, obligaciones y derechos tanto del fiduciario como del beneficiario. En el contrato también quedará recogido el tipo de fipo de fideicomiso establecido. Existen varias cuestiones en las que los fideicomisos pueden diferenciarse:
Revocabilidad
Según se haya establecido el fideicomiso podrá ser:
- Fideicomiso revocable: el otorgante tendrá la posibilidad de modificar o incluso disolver el fideicomiso en cualquier momento y de acuerdo a su voluntad. Esta flexibilidad permite al otorgante tener un mayor control sobre los bienes o activos en el fideicomiso durante su vida.
- Fideicomiso irrevocable: presenta condiciones más estrictas y una vez que se ha establecido, es difícil de modificar o revocar. El otorgante se despoja completamente de sus bienes y cede el control y la propiedad al fiduciario.
Disfrute o derechos sobre los bienes:
El fiduciante o testador podrá establecer los derechos de los fiduciarios sobre su patrimonio. En función de esto, pueden diferenciarse dos tipos de fideicomiso:
- Fideicomiso puro: es el más común. La potestad del fiduciario sobre los bienes queda limitada a su gestión temporal, cumpliendo las condiciones establecidas en el contrato. Una vez se cumpla el contrato, los bienes pasarán al fideicomisario.
- Fideicomiso de residuo: en esta variante de fideicomiso el fiduciario podrá disfrutar del patrimonio personalmente. En estos contratos pueden quedar establecidas restricciones para reservar una cuantía al fideicomisario, pero también puede darse libertad plena al fiduciario sin restricciones.
Forma de ejecutar el contrato:
- Fideicomiso condicional: el testador o fiduciante establece unas condiciones determinadas que deben cumplirse antes de activar el fideicomiso. Una vez tengan lugar, el fideicomisario recibirá los bienes del fiduciario.
- Fideicomiso a plazo o a término: el fiduciante impondrá una ventana temporal concreta que debe cumplirse antes de que el beneficiario o fideicomisario reciba los bienes. Una vez transcurra el plazo, se ejecutará el fideicomiso.
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